sábado, 12 de septiembre de 2009

entre junio y agosto.

Me daba miedo volver a verte tan seguido. No quería pensar que no podríamos hablar igual que siempre, que tu fumaras menos y yo de menor calidad. No quería encontrarme con una persona diferente, con una barba más prominente y con las leyes pegadas en tu lengua.
Tenía miedo que te olvidaras de las canciones, que te arrepintieras de todo lo que vivimos y que hubieses encontrado a alguien que entendiera mejor tus cuentos donde el protagonista siempre fuma.
No quería hablar contigo de mi vida porque entendería los motivos de nuestra distancia, de nuestras diferencias.
Tenía miedo de no tener una gran conversación, de escuchar " ahora no pienso lo mismo", tenía miedo de no pertenecer a tu vida y de no formar parte de tus palabras en tus historias.

No te digo nada de esto en nuestro blog, porque esto es mio y para ti. Porque ahora puedo saber que eres mi para siempre.

Eres gran parte de mis palabras cursis sin talento ( honestas eso si que si ) eres mi des-miedo a soñar cosas raras y malvadas, eres mi valor y eres mucho de mi personalidad, vos querido sos mis palabras inspiradas, mis rabias mas grandes, eres el vicio humeante que me terminará matando, eres los errores que cuestan caro, eres la cerveza de un día lunes y los fondos del curso malgastados ( ni tan malgastados) eres un departamento en el centro, eres mi escritor favorito, la CH bien pronunciada, un tango pecaminoso ( tu entiendes) y mis eternas ganas de hacer cosas imposibles.
Eres también las cosas que no he podido ser.